Una vez que llegan a cierta edad, la mayoría de las mujeres optan por depilarse ahí abajo. Ya sea por comodidad, higiene o porque quieren lucir geniales en su biquini, las chicas se someten a dolorosos e incómodos tratamientos con el fin de eliminar hasta el vello más pequeño.
Si es la primera vez que lo harás o simplemente quieres hacerlo de una mejor manera, te recomendamos que pongas atención a los siguientes consejos, pues te van a resolver la vida en muchos aspectos. Adiós irritación, adiós dolor. Con estas consideraciones, depilarse será la cosa más fácil del mundo.
1.- Si el arbusto está muy crecido, primero rebaja con tijeras.
Antes de meter el rastrillo, la máquina o la cera, procura quitar a mano la mayoría del vello en esa zona, así cuando utilices las otras herramientas será mucho más sencilla la depilación. Debes ser cuidadosa, pues esa zona es muy sensible, así que tomate tu tiempo y hazlo con calma.
2.- Utiliza un rastrillo nuevo cada vez que te rasures.
Las navajas de los rastrillos se gastan al poco tiempo, sobre todo si estamos hablando de un rastrillo desechable. Lo más recomendable para irritar lo menos posible, es utilizar un rastrillo nuevo cada vez que te quieras rasurar. Así que no escatimes en gastos y compra nuevos rastrillos.
3.- Rasúrate en la regadera.
Una ducha caliente es lo mejor que puedes hacer para rasurarte más fácilmente. Debido a la temperatura, tus poros se abrirán de tal forma que será muy fácil rasurar con un rastrillo.
4.- Antes de rasurarte, ¡exfóliate!.
Con un buen exfoliante podrás suavizar mucho la zona, eliminar los vellos enterrados y de paso eliminar todas las células muertas que ahí se depositan. Tendrás una piel suave, tersa y fácil de rasurar.
5.- Humedece el rastrillo
Siempre rasúrate con el rastrillo húmedo. De esta manera, gracias a la lubricación, habrá menos fricción, por lo que habrá menos irritación.
6.- Rasúrate con dirección de crecimiento de vello.
De esta manera podrás eliminar el vello de forma más natural y armoniosa.
7.- Las herramientas necesarias.
Es importante que cuando te depiles, tengas a la mano todas herramientas necesarias para hacerlo sin ningún problema.
8.- Elimina los rastros de productos ajenos.
Crema, gel, espuma para afeitar, sin importar que es lo que utilices para rasurarte, limpia con suficiente agua y asegúrate de no dejar ningún residuo, pues podrían causar irritación o una infección.
9.- Una vez limpio, seca con suavidad.
Una vez que te hayas rasurado y limpiado con muchísima agua, sécate con mucho cuidado, pues la fricción con la toalla podría irritarte más que con un rastrillo sin filo. Se cuidadosa y de preferencia utiliza toallas de 100% algodón.
10.- Hidrata tu piel.
Como punto final, después de rasurarte, limpiarte y secarte, aplícate algún tratamiento hidratante, eso mantendrá tu piel fresca y lisa, como la nalga de un bebé.
Si sigues estos consejos al pie de la letra, depilarte dejará de ser una experiencia muy incómoda. Gozarás de las ventajas de tener un cutis perfecto y una piel lisa como arena de desierto
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